Científicos del Conicet descubrieron que las inmediaciones de la laguna del diamante, en San Carlos, fue un sitio sagrado de los aborígenes.
El espejo de agua y el volcán Maipo eran considerados deidades, unos 2600 años atrás.
Así se desprende del estudio de un conjunto de estructuras arquitectónicas complejas que encontraron guardaparques mendocinos en 2022.
Sol Zárate Bernardi, Arqueóloga en el Laboratorio de Paleoecología Humana del Conicet, dijo a nihuil que los elementos muestran una permanencia de la población en el lugar.